sábado, 8 de junio de 2013

Entre dos mundos

Esta madrugada ha llovido con tanta intensidad que el ruido del agua contra el cristal de la claraboya me ha despertado.

Pero no he abierto los ojos, lo que he hecho ha sido permanecer en la misma posición y permitir que ese sonido se infiltrase en mi sueño antes de regresar a él.

5 comentarios:

molinos dijo...

Lo que más me fastidia de mi cuarto de Madrid es que no oigo la lluvia...y cuando me levanto, veo el suelo mojado y me lo he perdido.

No hay nada mejor que estar en la cama y escuchar la lluvia.

El sol no se oye.

andandos dijo...

Me he despertado, he hecho varias predicciones sobre la intensidad de la lluvia, ha acertado un par, me he equivocado en otro par y creo que me he dormido, hasta las siete.

Un abrazo

Jesús Miramón dijo...

Cierto, Moli, no hay nada mejor que escuchar la lluvia desde la cama.

(Y el sol no se oye salvo en verano, cuando suenan las cigarras)

Jesús Miramón dijo...

José Luis, yo, después del ensayo y las copas en el Chanti, me fui a la cama cerca de las cuatro. No sé a qué hora llegó la tormenta pero me acunó hasta las ocho y media. Esta tarde también ha llovido. Empieza a gustarme este país.

andandos dijo...

Ahora llueve otra vez, y parece que lloverá de manera intermitente mañana también. No estamos acostumbrados, pero está bien que lo haga.

Un abrazo